martes, 23 de mayo de 2017

¿Eres emocionalmente inteligente?

Cuando la inteligencia emocional (EQ) apareció por primera vez parecía ser el eslabón perdido de un hallazgo peculiar: las personas con un coeficiente intelectual promedio superaron a aquellos con altos coeficientes intelectuales hasta el 70% de las veces.



Esta anomalía desmintió por completo la falsa suposición que el coeficiente intelectual era la única clave del éxito profesional.

Luego de décadas de investigación apuntan ahora que ser emocionalmente inteligente es el el factor crítico que separa a las personas exitosas del resto de la población. La conexión es tan fuerte que el 90% de las personas de éxito tienen una gran inteligencia emocional.

De esta forma, las personas con altos niveles de inteligencia emocional:

1. Tienen un vocabulario emocional robusto

Todas las personas experimentan emociones, pero solamente un grupo selecto puede identificarlas con precisión a medida que ocurren. La investigación reveló que sólo el 36% de la gente puede hacer esto. Así, mientras muchas personas podrían describir su estado de ánimo como sentirse “mal”, las personas emocionalmente inteligentes pueden determinar si se sienten “frustrados”, “oprimidos” o “ansiosos”.

2. Muestran curiosidad por las personas

No importa si son introvertidos o extrovertidos, las personas emocionalmente inteligentes tienen curiosidad acerca de todo el mundo que les rodea. Esta curiosidad es el producto de la empatía, uno de los mayores indicadores de inteligencia emocional.

3. Aceptan el cambio

Las personas emocionalmente inteligentes son flexibles y se adaptan de forma constante. Ellos saben que el miedo al cambio es paralizante y a menudo una amenaza importante para su éxito y felicidad.

4. Conocen sus fortalezas y debilidades

Las personas emocionalmente inteligentes no sólo entienden sus emociones; ellos saben en lo que son buenos y malos. Conocen sus fortalezas y saben cómo sacar ventaja de ellas.

5. Entienden y reconocen el carácter de los demás

Gran parte de la inteligencia emocional se reduce a la conciencia social y la capacidad de leer a otras personas. De tal modo que la persona que es emocionalmente inteligente conoce y comprende las motivaciones, fortalezas y debilidades de los que les rodean.

6. Son difíciles de ofender

También este tipo de personas tienen una sólida comprensión de si mismas, por lo que es difícil que alguien diga o haga algo que consiga enojarlos. Las personas emocionalmente inteligentes son seguras de sí mismas y de mente abierta, por lo que ofenderlos no es tarea fácil..

7. Saben decir “No”, tanto a ellos mismos como a los demás

La inteligencia emocional significa saber cómo ejercer el autocontrol evitando las acciones impulsivas. Las personas que saben decir “No”, tienen menos probabilidades de experimentar estrés, sentirse agobiados, e incluso deprimidos.

8. Restan importancia a sus errores

Las personas emocionalmente inteligentes se alejan de sus errores, pero lo hacen sin olvidarlos. De esta forma son capaces de adaptarse y prepararse para el éxito futuro. La clave para mantener el equilibrio radica en su capacidad para transformar los fracasos en enseñanzas.

9. Dan sin esperar nada a cambio

Cuando alguien da algo de forma espontánea, sin esperar nada a cambio, deja una poderosa impresión en las personas. Las personas emocionalmente inteligentes construyen relaciones fuertes porque están constantemente pensando en los demás.

10. No guardan rencores

Las emociones negativas que trae consigo el rencor son en realidad una fuente de estrés. El sólo pensar en un evento desagradable pone el organismo en modo de lucha, un mecanismo de supervivencia en contra de cualquier amenaza.

11. Neutralizan a la gente tóxica

Tratar con personas difíciles es frustrante y agotador para la mayoría de nosotros. En cambio, las personas de este tipo controlan sus interacciones con la gente tóxica al mantener sus sentimientos bajo control. Identifican sus propias emociones y no permiten que la ira o la frustración los lleve a perder el control.

12. No buscan la perfección

Las personas emocionalmente inteligentes no tienen a la perfección como su objetivo central, porque saben que no existe.

13. Aprecian lo que tienen

La investigación también encontró que la persona que es emocionalmente inteligente que trabajaba a diario para cultivar una actitud de gratitud experimenta un mejor estado de ánimo, más energía y bienestar físico.

Marc Soriano
Coach ejecutivo

No hay comentarios:

Publicar un comentario